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ONICOMICOSIS


Es la infección por hongos en las uñas de los  pies y/o manos, siendo mas común  en los pies, debido al uso de calzados y medias sintéticas que produce su decoloración, engrosamiento y deformidad. Además, es frecuente encontrar asociado otras infecciones por dermatofitos como: tiña pedís, tiña cruris y tiña corporis.

Hay cuatro tipos clásicos de onicomicosis:

1.- Onicomicosis subungueal distal: La forma más común de ''Tiña unguium'' provocada por ''Trichophyton rubrum'', que invade el lecho ungueal y la parte inferior de la placa de la uña.

2.- Blanco onicomicosis superficial: Causada por la invasión de hongo de las capas superficiales de la placa de la uña para formar "islas blancas" en el plato. Representa sólo el 10 por ciento de los casos de onicomicosis.

3.- Onicomicosis subungueal proximal: Penetración de hongo de la placa de la uña recién formada a través del pliegue proximal del clavo. Es la forma menos común de ''Tiña unguium'' en personas sanas pero encontraron más comúnmente cuando el paciente es inmunocomprometido.

4.- Onicomicosis candidal: Especies de Cándida invaden las uñas normalmente que se producen en las personas que con frecuencia sumergir sus manos en el agua. Esto normalmente requiere el daño previo de la uña por infección o trauma.

Causas:
-  Lesión de la uña.
-  Exposición a ambientes cálidos y húmedos.
-  Zapatos ajustados.
-  Medias húmedas.

Factores de riesgo:

-  Edad entre 60 años a más.
-  Fumar.
-  Tipo 1 o 2 de diabetes.
-  Trastornos circulatorios, como la enfermedad vascular periférica.
-  Trastorno del sistema inmune.

Signos:

- Uña descolorida y antiestética.
- Uña gruesa que es difícil de corta.
- Uña quebradiza desigual.

Tratamiento:
En consultorio realizamos una profilaxis integral retirando la parte infectada de la uña que alberga gran carga micotica, la medicación para el tratamiento, se prescribe con antimicótico de aplicación tópica directamente en la zona infectada sin causa de efectos secundarios
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Quiropodologia

La quiropodia es el tratamiento por el cual y mediante diversas técnicas manuales conseguimos solucionar las alteraciones negativas que nuestros pies van adquiriendo con el tiempo. Así, el podólogo es el especialista capaz de mejorar la salud de nuestros pies en una sesión centrada en el corte y fresado de las uñas y en la eliminación de diversas queratopatías (durezas) que nuestro pie pueda presentar tanto en los dedos como en las plantas de nuestros pies. Aún cuando nuestro pie no padece ningún dolor es recomendable acudir al podólogo para realizar una revisión de nuestros pies y poder diagnosticar así afecciones que podríamos sufrir antes de que estas desarrollen una sintomatología dolorosa.

ONICOMICOSIS (hongos en las uñas)                        
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ONICOCRIPTOSIS (uñeros)
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HELOMAS E HIPERQUERATOSIS (callos)
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TIÑA PEDIS  (pie de atleta)                                            
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VERRUGAS O PAPILOMAS                                          
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